Las cosas no pintan muy bien para Tesla en China, donde acaba de sufrir un nuevo revés. Según datos de la Asociación China de Turismos, las ventas de la compañía de Elon Musk cayeron en abril.
Parece que las cosas empiezan a ir mal para Tesla en China. La compañía de Elon más ha sufrido un nuevo revés en el gigante asiático, ya que sus ventas cayeron un 18% en abril, según ha revelado la Asociación China de Turismos (CPCA).
De momento, se trata de cifras provisionales, pero según esta entidad china, Tesla vendió 62.167 coches fabricados en su planta de Shanghái el mes pasado, lo que supone una sexta parte menos que en el mismo periodo de 2023. Y, si lo comparamos con marzo de este año, la caída es del 30%.
El revés para Tesla se extiende más allá de las fronteras chinas, ya que una parte de los Model 3 y Model Y que salen de su gigafactoría en Shanghái se exportan a otros mercados, como Europa, y se verá afectada por la caída de la demanda de coches eléctricos en todo el mundo.
Las ventas de Tesla caen en China en abril
A la preocupación de Tesla se suma el hecho de que el mercado global de vehículos eléctricos en China ha crecido. Según señala el diario chino Morning Star, las ventas de vehículos eléctricos en el país asiático aumentaron un tercio el pasado mes de abril, hasta situarse en el entorno de las 800.000 unidades.
Por otro lado, Reuter apunta que el descenso del 25% en las ventas de vehículos eléctricos en febrero puede explicarse en parte por el Año Nuevo Lunar, que este año cae en febrero en lugar de enero.
Después de superar a Tesla como mayor productor mundial de vehículos eléctricos a finales del año pasado, BYD consolidó su posición al vender 312.048 coches eléctricos en abril, un 49% más que en abril de 2023 y un 3,5% más que en marzo de este año.
Reducción de plantilla
Tesla anunció el mes pasado que reduciría su plantilla mundial en un 10% para reducir costes y ha rebajado drásticamente los precios de sus modelos para impulsar la demanda y seguir el ritmo de la competencia que ejercen las marcas chinas.
Al parecer, a finales de abril se despidió a todo el equipo de supercargadores, varios altos ejecutivos se han marchado y se recortarán 2.700 puestos de trabajo en la sede central de la empresa en Austin, Texas, Estados Unidos.
También se rumorea que la empresa ha dado carpetazo a sus planes de introducir un proceso de gigacasting de nueva generación (término creado por Tesla referido a reducir los costes de producción), pero recibió una buena noticia al asegurarse el derecho a ofrecer su propia tecnología de conducción autónoma en China.
