Pablo Alborán durante la gala de los Grammy 2023 en Sevilla. /
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Después de pasarse gran parte de los últimos doce meses recorriendo los escenarios de España, Latinoamérica y Estados Unidos,
el popular cantante malagueño Pablo Alborán vuelve a casa para recuperar fuerzas junto a su familia y sus amigos y afrontar con energía sus nuevos proyectos. A su regreso hace escala en el plató de
‘El hormiguero’ de Pablo Motos, donde en el pasado ya ha confesado algunas anécdotas sobre su perfil más personal, que normalmente suele cuidar con mimo.
Frente a las hormigas Trancas y Barrancas contó por ejemplo las
«burradas» que le piden sus fans durante los conciertos. Una de ellas le ocurrió en Nueva York donde «había una mujer que estaba cantando constantemente mis canciones y escuché a un hombre decir que su mujer quería un hijo mío y no suyo». También relató que duerme fatal ya que «mi cabeza no para porque le doy muchas vueltas a las cosas» y que para evitarlo, se lleva su propia almohada cuando se va de gira.
Celoso de su intimidad, el artista andaluz también sorprendía a propios y extraños cuando en 2020 se decidía a hacer esta
confesión sobre su orientación sexual: «Estoy aquí para contaros que soy homosexual. No pasa nada, la vida sigue igual. Yo necesito ser un poco más feliz de lo que ya era». Estas palabras a corazón abierto las compartía en su cuenta de Instagram, añadiendo que «en mi casa, en mi familia, siempre me he sentido libre de amar a quien yo he querido».
Es de esa casa y de esa familia de las que, salvo en contadas ocasiones, no suele hablar Pablo Alborán
ni en entrevistas ni en sus redes sociales. Pero con los años, sí ha dado algunas pinceladas sobre las personas con las que ha compartido su vida y que vamos a recordar a continuación.
Así son los padres de Pablo Alborán: un famoso arquitecto y su fan número uno
Decía el cantante frente a los micrófonos de Cadena 100 que hablar con su padre «es una gozada porque sabe de todo» y que su madre tiene «una gran mirada crítica» sobre las cosas y «sabe escuchar». Esa madre que se ha convertido en
su mayor fan es Elena Ferrándiz. Nacida en Casablanca durante el protectorado francés de Marruecos, es de origen francés pero hija de españoles.
Ella fue
la que le cantaba desde niño, la que le ayudó en los primeros años con la gestión de su carrera y la que acude a ver a su hijo en concierto siempre que puede. A ella le dedicaba hace un par de años en Barcelona una canción desde el escenario de forma muy tierna. «Tú, que siempre has estado presente y cuando no estaba la gente que tanto me prometía», entonaba entonces el cantante, añadiendo un «tú, mamá» al principio de la frase.
Pablo Alborán en uno de sus conciertos. /
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El padre de Pablo, pianista frustrado, es un conocido arquitecto y urbanista:
Salvador Moreno de Alborán. Graduado en la Escuela Superior de Arquitectura de Madrid en 1972, ha sido el responsable de algunas de las infraestructuras más conocidas de Málaga y Torremolinos. «Nos ha salido el niño de la farándula, pues qué bien. Yo, que llevo desde crío aporreando el piano, no he juntado dos acordes, y el cabroncete lleva ochenta canciones, letra y música. Es un poeta, el niño, un generador de nostalgias futuras», declaraba Salvador sobre su hijo con orgullo.
Sus hermanos: una diseñadora de interiores y un publicista
Pablo es el benjamín de la familia.
Su hermana mayor se llama Casilda, tiene doce años más que él y es licenciada en Filosofía, aunque trabaja como diseñadora de interiores, un oficio que ha ejercido en la casa del cantante en Madrid. Ambos tienen una relación muy estrecha, cimentada en una importante decisión que Casilda tomó cuando él era pequeño y que confesó en el programa ‘Mi casa es la tuya’ de Bertín Osborne.
El cantante relató entonces cómo, cuando él era pequeño, su hermana mayor renunció a irse a estudiar al extranjero por
no perderse su infancia y estar a su lado. «Ella dejó pasar su oportunidad por estar conmigo, y yo no dejé pasar mi tren, yo me subí cuando a los veinte años se disparó todo», admitía ante su colega de profesión.
Pablo Alborán en una imagen reciente. /
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Su otro hermano es Salvador, publicista y pintor, que con los años se ha convertido en una figura clave en la carrera musical de Pablo, en el papel de su director artístico. Incluso se podría decir que fue uno de sus impulsores desde un principio ya que fue a él a quien el cantante robó su primera guitarra y quien le animó a formarse como músico.
Sobre su labor como su sombra cuando
emprende sus tours musicales, le decía también a Bertín: «Me hace todo: las giras, diseños, portadas de disco, videoclips… ha sido hasta mi padre también».
Su bisabuelo: el poseedor de un polémico marquesado
Paulo Alborán es bisnieto del almirante
Francisco Moreno Fernández, el que fuera primer marqués de Alborán. Este título fue creado en 1950 por el dictador Francisco Franco, que se lo entregó de forma póstuma al bisabuelo del cantante. Pero en 2022, con la entrada en vigor de la Ley de Memoria Democrática, el marquesado llegó a su fin.
La noticia
no molestó especialmente al artista, que en declaraciones al ‘ABC’ aseguraba entonces: «Yo no pierdo nada, porque como nunca he tenido el título, pues nada pierdo. No se pierde lo que no se tiene. Así que eso es ahora cosa de mi padre. Yo a lo mío que es cantar».
Este título sí le costó no obstante una
agria polémica en las redes sociales. Fue por culpa de las acusaciones del periodista Fonsi Loaiza de haber tenido supuestos «privilegios en España por ser familiar de un fascista».
Sin perder las formas en ningún momento, el cantante le contestaba en aquel momento
negando esos supuestos privilegios añadiendo que «apoyo la paz en Venezuela y estoy en contra de cualquier tipo de dictadura». Posteriormente recriminaba las acusaciones diciendo: «No intentes atacarme con un pasado en el que ni existía yo ni existías tú. Y obvio que no soy franquista, hasta dónde vamos a llegar. Hay que ser ignorante. Qué sabrás tú si mi familia ha heredado algo. Y cuáles son mis ideales políticos».
