Carmen Machi es una de las actrices más polifacéticas de nuestro país. /
GTRES
Nacida hace 61 años en Getafe,
Carmen Machi no fue una de esas niñas que tenían claro desde pequeñas que querían ser actrices. Pero mucho antes de que se lanzara a trabajar en una compañía de teatro y debutara haciendo de novia en la tragedia de Federico García Lorca ‘Bodas de sangre’, ella ya organizaba sus propias ceremonias de premios en casa de sus padres, en las que ensayaba
cómo sería recibir un Oscar de la Academia.
«No tenía ninguna intención de ser una actriz de cine, eso parecía algo imposible», reconocía la madrileña durante una visita
a ‘El Hormiguero’. «Pero es verdad que con mis hermanos, que siempre nos ha gustado mucho el cine y la
gala de los Oscar, esa situación de la actriz recogiendo el premio y dando un discurso pues yo la hacía, pero con una virgen que se iluminaba. Reconozco que lo hacía, me da un poco de corte decirlo, pero es la realidad«, confesaba en aquella ocasión.
Aportando más detalles frente a
Pablo Motos de cómo era de pequeña aquella niña que años más tarde se convertiría en una de las actrices más queridas y reconocidas de nuestro país,
Carmen no se mordía la lengua y hablaba sin tapujos de los problemas con su alimentación que llevaron a su madre por la calle de la amargura.
«No comía, me daba asco la comida y solo tomaba zumos de naranja y me ponían inyecciones de hígado de bacalao. Empecé a comer normal a los siete años. También
era muy tímida y muy delgada, mi madre decía que le daba vergüenza sacarme a la calle«, reconocía la intérprete que saltaría a la fama por su personaje de Aída García en ‘Siete vidas’ y el posterior spin off.
Carmen Machi, amiga de sus amigas y problemas con los fans
De su paso por ambas series sacó unos buenos ahorros que le permitieron comprarse una modesta vivienda en su barrio preferido de la capital, Malasaña, y duraderas amistades con compañeros como
Paco León o
Melani Olivares. De lo profundo de la relación con esta última daba cuenta ella misma cuando visitó el plató de ‘Sábado Deluxe’.
Melani confesaba entonces la difícil situación económica que atravesaba tras la pandemia y reconocía que Carmen Machi era una de las personas a las que
agradecía su ayuda económica en ese momento complicado. «Me van a matar, pero gracias a ellos he podido tirar para adelante. Tener a tu lado a gente que te quiere y te ayude, es maravilloso», le contó entonces a Jorge Javier Vázquez.
Lejos de matarla y después de que Melania hablara abiertamente de su generosidad, Carmen hablaba sobre su «hermana» desde la alfombra roja de los
Premios Feroz. «Melani forma parte de mi vida igual que Paco León, que está por ahí también. Es mi hermana y si ella ha comentado eso, pues la gente que se quiere se ayuda, ¿no? Ella es extraordinaria y me ha ayudado mucho también».
Los actores de la serie ‘Aida’, reunidos años después de terminar la mítica serie. /
@melaniolivares
La fama puede jugar a veces en tu contra, y la enorme popularidad de Carmen le
granjeó el acoso de los fotógrafos y las excesivas atenciones de los fans, lo que degeneró en ataques de fobia y pesadillas que le impedían dormir bien. Ella misma ha reconocido que
no supo gestionar bien su fama y que acabó siendo diagnosticada con «fobia al ser humano».
Ya recuperada, tras dejar ‘Aida’, hizo campañas de publicidad, se convirtió en
Chica Almodóvar y su talento se vio reconocido con un premio Goya en el año 2014 por ‘Ocho Apellidos Vascos’.
Su discreto novio y su familia italiana
Fue precisamente al recoger ese codiciado galardón por su papel en la comedia dirigida dirigida por
Emilio Martínez-Lázaro cuando se lo dedicó a su pareja, Vicente, «por ser más bonito que na». Alérgico a los eventos y a los photocalls, esa fue una de las pocas ocasiones en las que vimos juntos a esta pareja que acumula ya más de dos décadas de amor lejos del foco mediático.
Ambos disfrutan de su vida en la capital y de sus escapadas a su querida Zahara de los Atunes y
no parecen tener planes de pasar por el altar próximamente. De hecho en alguna ocasión ha declarado que «casarme me da miedo, lo mismo que tener un hijo».
En una entrevista publicada por Mujerhoy en 2021, la actriz nos contaba al respecto que «Vicente es maravilloso, es un ser extraordinario». También mostraba su incomodidad cuando le preguntaban por la maternidad: «Yo, desde luego, no me siento incompleta por no tener hijos y soy muy feliz, pero habría que reflexionar sobre esto. ¿Es la mujer la que piensa que otra mujer es incompleta por no tener hijos o te lo preguntan aquellas que están frustradas precisamente por haberlos tenido?».
El
blindaje a su vida personal afecta también al resto de su familia, aunque en alguna ocasión no se resista a contar alguna anécdota sobre ella. «No soy tirana, pero sí tengo una parte profunda siciliana que aflora», explicaba la actriz frente a los micrófonos de la SER.
Son precisamente esos orígenes italianos los que dan pie a su secreto familiar más controvertido. A la actriz le gusta bromear con que
su bisabuelo era un mafioso: «Lo que sabemos es que apareció muerto en un hotel de Madrid, con muchísimo dinero y es verdad que se lo habían cargado, pero nos hemos recreado un poco. Lo contamos porque eso nos da a nosotros como que somos especiales», aseguraba en la radio con un buen humor. Ya se sabe, no dejes que la realidad te estropee un buen titular.
