Lilian de Carvalho Monteiro y Boris Becker. /
gtres
El tenista alemán
Boris Becker
convertirá a su prometida
Lilian de Carvalho Monteiro en su tercera esposa este fin de semana, con una gran fiesta de tres días de duración en un lujoso complejo turístico italiano. El retirado deportista, de 56 años, se casará con Lilian, una analista de riesgos nacida en la isla africana de Santo Tomé y Príncipe, en Portofino ante unos 150 invitados. Esta será la tercera esposa del ganador de seis torneos de Grand Slam después de sus divorcios de Barbara Feltus y Sharlely ‘Lilly’ Kerssenberg, amén de sus sonadas aventuras extramatrimoniales. Algo especialmente llamativo es que sus tres esposas son físicamente idénticas.
Su futura esposa, 23 años menor que Boris, ha estado a su lado en las duras y en las maduras después de que el extenista fuera
condenado a dos años y medio de cárcel en el Reino Unido por haber ocultado activos y préstamos por valor de 3 millones de euros en un caso de fraude por quiebra. Boris cumplió ocho meses de la condena en las prisiones de Wandsworth y Huntercombe antes de ser deportado de vuelta a Alemania en diciembre de 2022, lo que le ha impedido recuperar su trabajo como comentarista en la BBC.
Monteiro, que reside en Londres, es analista de riesgos políticos, habla cinco idiomas, entre ellos el alemán, según el diario ‘Bild’. Nació en el estado insular africano de Santo Tomé y Príncipe y es
hija de Victor Monteiro, exministro de Defensa de la república que se presentó a las elecciones presidenciales de 2014. Tras pasar gran parte de su juventud en Roma, se instaló en la capital británica para estudiar en la Escuela de Estudios Orientales y Africanos, donde obtuvo un máster a los 25 años.
Boris y Lilian en una imagen reciente. /
GTRES
En 2021, Boris Becker le propuso matrimonio en la catedral de Milán, pero
su inminente condena a prisión truncó entonces sus planes de boda. Durante el descenso a los infiernos del teutón, ella siempre se ha mantenido a su lado e incluso le dio un beso de despedida cuando fue encarcelado el año pasado y el juez le reprochó que no mostrara remordimientos. Según asegura a ‘The Sun’ una fuente cercana a la pareja, «Boris está increíblemente agradecido a Lilian por haberse quedado con él durante el momento más difícil de su vida».
El primer matrimonio de Boris Becker
El tres veces campeón de Wimbledon
se casó en 1993 con Barbara Feltus cuando ella estaba embarazada de ocho meses de Noah Gabriel, su primer hijo, al que llamaron así por sus amigos Yannick Noah y Peter Gabriel. Justo antes de la boda, Barbara y él protagonizaron una escandalosa portada posando desnudos para ‘Stern’ en una foto tomada por el padre de ella.
Barbara Feltus y Boris Becker en 2004. /
gtres
Cinco años más tarde, cuando estaba embarazada de su segundo hijo, Elias,
la camarera rusa Angela Ermakova se puso en contacto con Barbara y le comunicó la noticia de que había tenido un hijo con Becker, lo que supuso el fin de su matrimonio. El alemán se negó en un principio a reconocer la paternidad del bebé, alegando que solo había practicado sexo oral con Ermakova. Sus abogados alegaron que esta había robado su esperma y lo había utilizado para inseminarse después del encuentro.
En enero de 2001 finalizaron los trámites del divorcio, en el que Barbara recibió
15 millones de euros de indemnización, su mansión en Fisher Island, Florida, y la custodia de sus dos hijos. Becker hablaría largo y tendido de los pormenores de su divorcio en su autobiografía, en la que también confesó su adicción a los analgésicos y somníferos al principio de su carrera como tenista, así como su promiscuidad y su consumo excesivo de alcohol para sobrellevar la soledad cuando jugaba torneos internacionales.
Compromiso fallido y segundo ‘sí, quiero’
En 2008, Boris anunció que se iba a casar con
la modelo holandesa Sharlely ‘Lilly’ Kerssenberg
. Lilly dijo que habían hablado de su compromiso con la exmujer de Boris, que les había dado su bendición. Poco después, se separaron y él se comprometió con su nueva novia, Alessandra Meyer-Wölden, 16 años menor que él e hija de su antiguo manager, pero la pareja rompió al poco tiempo. Sobre su breve relación, Alessandra diría «sabía que Boris era Boris, pero no tenía ni idea de lo que eso conllevaba.
Su vida personal era un caos. Hubo divorcios, hubo hijos, hubo rupturas».
Sharlely ‘Lilly’ Kerssenberg y Boris Becker /
gtres
Por su parte, Lilly trató de superar su ruptura, según confesó en el documental ‘Boris Becker: auge y caída’, viajando Ibiza para «probar todas las setas alucinógenas, todas las bebidas alcohólicas y todas las drogas de Ibiza.
No podía emborracharme lo suficiente para olvidar a ese hombre».
Lilly y Boris se reconciliaron y se casaron en la estación de esquí suiza de El Paradiso en 2009. En la boda estuvieron presentes amigos y familiares, entre ellos su hijo Noah Gabriel.
La pareja estuvo casada durante nueve años, tuvieron un hijo y se separó finalmente en 2018, un año después de que el extenista se hubiera declarado en bancarrota, con unas deudas a sus acreedores que superaban los 50 millones de euros.
«Estaba profundamente enamorada de él. De su carisma, su pasión, su humor. Las cosas por las que el público le adora», añadía Lilly en el mencionado documental estrenado en 2023. «
Boris es un narcisista. Una persona egoísta. Está acostumbrado a controlar y manipular a los demás. Pero no me silenciará, aunque vuelva a enviar a sus abogados a por mí», aseguraba sin miedo la holandesa, que no guarda buen recuerdo de sus años en común.
