Isabel Preysler en el funeral de Caritina Goyanes /
GTRES
El pasado lunes 26 de agosto,
Caritina Goyanes fallecía en Marbella a los 46 años, justo dos semanas después de
la muerte de Carlos Goyanes, su padre. Una tristísima noticia que ha llenado de dolor a familiares y amigos. Tras el funeral que tuvo lugar la mañana del martes 27 de agosto en Marbella, la familia tomó la decisión de trasladar los restos mortales de Caritina a Madrid.
De esta forma es en la capital, el lugar donde la familia reside y tiene la mayor parte de sus amigos, donde se va a llevar a cabo
la última despedida. En estos momentos la familia y los amigos más cercanos de Caritina están llegando al tanatorio de La Paz-Tres Cantos, donde se celebra una misa a las dos de la tarde en el tanatorio madrileño para que puedan despedirse de ella.
Tras el velatorio,
la hija mayor de Cari Lapique será enterrada en el cementerio de San Isidro en una ceremonia privada. La familia Lapique tiene un lugar reservado en ese cementerio, donde también se colocarán las cenizas de Carlos Goyanes, que hasta ahora permanecían en la casa de Marbella.
El último adiós de Isabel Preysler a Caritina
Isabel Preysler ha sido de las primeras en llegar al tanatorio, acompañada de su hija Tamara. La socialité es una de las amigas más íntimas de Cari Lapique desde hace décadas, por lo que tenía un trato muy cercano con su hija mayor. Tanto era así que Caritina consideraba a Isabel una segunda madre.
Isabel Preysler y Tamaa Falcó en el funeral de Caritina Goyanes /
GTRES
Cari Lapique e Isabel Preysler han vivido muchos momentos importantes juntas. Isabel estuvo presente en las bodas de las dos hijas de Cari y Carlos Goyanes, y el año pasado, tanto Lapique como su hija Caritina fueron invitadas
a la boda de Tamara Falcó e Íñigo Onieva en El Rincón. Además, cada verano coinciden durante algunos días en Marbella, lo que ha fortalecido su amistad a lo largo de los años.
Isabel ha acudido hoy al tanatorio con una blusa blanca de manga francesa acabada en puño, y cierre mediante botones con detalle de ribetes. Lo ha combinado con un pantalón de traje en negro, de tiro alto y corte campana, y unas sandalias con plataforma. Un sencillo bolso negro de rafia y gafas de sol, cerraban un estilismo
sencillo y elegante.
Un look que ha compartido con su hija Tamara, que ha acudido acompañada también de su marido, Iñigo Onieva, y que ha elegido
la misma fórmula que su madre: blusa blanca y pantalones negros, acompañados de unas gafas con montura cat-eye y sandalias de tacón.
Entre los asistentes a la misa celebrada en Madrid, también se encuentran rostros conocidos como el torero
Fran Rivera, la aristócrata
Alejandra de Rojas o
Núria González, otra de las amigas íntimas de Cari Lapique. Todos ellos, muy emocionados, han querido mostrar su apoyo incondicional a la familia en estos momentos tan complicados.
