Los protagonistas de ‘Heartstopper’. /
netflix
Los adolescentes
Charlie y Nick descubren que su amistad podría ser mucho más que eso mientras lidian con la escuela y el amor en esta serie sobre convertirse en adulto. Esta es la sucinta descripción en la web de Netflix sobre la aclamada
comedia dramática británica ‘Heartstopper’
, acertada adaptación de
las novelas gráficas
de Alice Oseman, también guionista de la serie, que rápidamente se convirtió en todo un fenómeno desde su estreno en abril de 2022.
Después dejar a nuestros protagonistas en su memorable baile de graduación, en la recién estrenada tercera temporada,
Charlie (Joe Locke) y Nick (Kit Connor) profundizan en su improbable amistad hasta convertirla en un romance. Al mismo tiempo, la trama se vuelve más madura
abordando varios problemas de salud mental.
Además del regreso de gran parte del elenco original, la gran novedad de esta nueva tanda de capítulos es la aparición de Jonathan Bailey, el rompecorazones de
‘Los Bridgerton’.
Nuestros chicos están creciendo, y la serie debe crecer con ellos. La pareja protagonista se plantea dar un paso más en su relación y los espectadores se sorprenderán al saber que, al principio,
esto implica decirse que se quieren. Cuando la hermana de Charlie, Tori (Jenny Walser), señala su sorpresa al saber que no lo hayan hecho ya, habla por todos nosotros.
‘Heartstopper’ está llena de momentos como estos, en los que
Nick y Charlie exploran su nueva relación, después de que el primero haya tenido que enfrentarse a los demonios de su propia vida, saliendo del armario con su madre (
Olivia Colman
) mientras su faceta de atleta le convertía en una persona popular y segura de sí misma.
Una mirada profunda a los problemas de salud mental
Aunque la relación de Charlie y Nick, basada en la confianza y, especialmente en esta temporada, en el amor, es lo que más engancha, todo lo que sube tiene que bajar, y los problemas del pasado se trasladan a su presente. Ahora Charlie se enfrenta a su salud mental de forma más intensa, cuando
su trastorno alimenticio y su TOC salen a la luz.
Una escena de ‘Heartstopper’. /
netflix
Cuando Charlie empieza a controlar su cuerpo y su mente, se enfrenta a la idea siempre presente de
tener sexo con Nick por primera vez y cruzar el puente hacia una nueva fase de su relación. Mientras tanto, Nick se encuentra en la difícil situación de averiguar cómo ayudar a su novio en algo que va mucho más allá de su capacidad como adolescente.
Todos los protagonistas de ‘Heartstopper’ tienen sus problemas y se enfrentan a dudas e incertidumbres, pero explican lo que les ocurre como si estuvieran examinando cada faceta de su comportamiento desde la distancia. En última instancia, todo parece tener solución, incluso en sus peores momentos. Esto es parte de lo que hace que
sea tan reconfortante ver la serie.
Aunque el ritmo frenético de la serie está más destinado a los que nacieron con un smartphone en la mano, que a los que tuvimos un Nokia 3210, hay mucho que aprender en ella para los adultos sobre cómo es ser adolescente hoy en día o sobre el universo LGBTIQ+, siguiendo la estela de otras series rompedoras y necesarias como
‘Sex Education’ o ‘Euphoria’.
Las razones del éxito de Heartstopper
Originalmente autopublicada como novela gráfica a través de una campaña de Kickstarter, su éxito se multiplicó cuando llamó la atención del productor Patrick Walters, de See-Saw Films. «Leer ‘Heartstopper’ fue como un relámpago. ¿Por qué no había habido antes una serie así? Había visto muchos romances juveniles heterosexuales en la pantalla, pero no se me ocurría ni un solo ejemplo de una historia queer como esta.
Teníamos que hacerla porque el mundo la necesitaba«, dijo Walters a ‘Hollywood Reporter’.
Elle (Yasmin Finney) y Tao (William Gao). /
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Con Netflix a bordo, se convocó un casting mundial para dar vida a Nick, Charlie y el resto de protagonistas. Aunque Kit Connor ya tenía experiencia como actor, Joe Locke aún estaba en el colegio en la Isla de Man cuando se presentó a la audición para interpretar al complejo Charlie. Ahora, ambos se han convertido en
superestrellas con millones de fans en Instagram.
La historia de Alice Oseman sobre el romance queer se ha convertido en un éxito a nivel mundial, colándose en
el top 10 de las series más vistas de Netflix en 54 países. Un éxito construido sobre la base de unos fans que quieren sentirse bien consigo mismos en tiempos difíciles.
Las novelas gráficas se reeditaron rápidamente con nuevas portadas, extractos del guion en la contraportada y una invitación a leer más en el webcomic original, que ahora tiene más de 124 millones de visitas. Por no hablar de los miles de millones de visualizaciones del hashtag #HeartStopper en TikTok. Todo un fenómeno al que vas a querer engancharte.
