Leonor en la Escuela Naval de Marín. /
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Cuando finalice un verano de lo más ajetreado en el que ha vivido
su primer viaje oficial en solitario al extranjero y ha disfrutado de los
Juegos Olímpicos junto a su hermana Sofía, la
princesa Leonor proseguirá su formación militar con su ingreso en la
Escuela Naval de Marín, en Pontevedra. Lo hará el próximo 29 de agosto tras concluir su primera etapa en la Academia General Militar de Zaragoza.
Allí, la heredera al trono recibía a principios de julio de manos de Felipe VI el
nombramiento como dama alférez cadete con el que cerraba la primera parte de su camino a ser la futura jefa de todos los ejércitos. Como sucedió el año pasado en su ingreso en el centro militar aragonés,
sus padres y su hermana acompañaban a la princesa de Asturias en un acto con el que siguió los pasos del monarca, que también recibió de manos de su padre, Juan Carlos I, el nombramiento como alférez hace casi cuatro décadas.
La princesa Leonor ya conoce el que está a punto de convertirse en su hogar, ya que lo visitó junto a Felipe VI en
la ceremonia de entrega de reales despachos a los nuevos oficiales de la Armada. Entonces el capitán de navío, Pedro Cardona, le daba la bienvenida anticipada
«a la que será su casa siempre», añadiendo que «no se me ocurre mejor manera para comenzar esta singladura con nosotros que participar en este acto solemne».
La Escuela Naval de Marín: una historia de tres siglos
Los orígenes de la escuela de la Armada Española
se remontan a 1717, cuando se funda en Cádiz la Academia de Guardias Marinas, promoviendo una enseñanza que fusionaba el modelo francés, fundamentalmente teórico, y el inglés, eminentemente práctico. A los futuros guardiamarinas se les exigía pertenecer a la nobleza. Era necesario además para ingresar superar un examen y no exceder la edad de 18 años.
La familia real en la Escuela Naval de Marín. /
GTRES
Tras pasar por varias ubicaciones a lo largo de los años, finalmente
en 1938 se decidió el traslado de la Escuela Naval a Marín, por las condiciones idóneas de la ría para las prácticas de navegación. Al finalizar la guerra civil española se iniciaron las obras en la Escuela de Tiro Naval, que acabaría transformándose en la actual Escuela Naval Militar, inaugurada el 15 de agosto de 1943, siendo ahora la única instalación de este tipo en España.
Este centro de formación está instalado en la localidad pontevedresa de Marín, donde al igual que sucedió
durante la estancia de Leonor en Zaragoza, es probable que la veamos
pasar su tiempo de ocio en compañía de sus nuevos compañeros.
Situado en la orilla meridional de la ría de Pontevedra, en la comarca del Morrazo, su población apenas llega a los 25.000 habitantes y destaca por su puerto pesquero, por sus petroglifos que datan del neolítico y por sus playas, que reciben cada año a miles de visitantes.
Así son las instalaciones de la Escuela Naval de Marín
Uno de los símbolos más icónicos de la Escuela Naval es su principal zona de acceso:
la puerta de Carlos I. Es un arco flanqueado por dos garitas, que permanece siempre bajo vigilancia militar y en el que se lee el lema en su parte alta, «Honor, Valor, Disciplina, Lealtad».
El rey Felipe navegando con Leonor y Sofía. /
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El recinto en el que se ubica la Escuela Naval Militar de Marín ocupa buena parte de la costa del municipio, desde el final del recinto portuario hasta casi la playa de Portocelo. En total son
más de 300.000 metros de superficie. En este espacio las instalaciones militares cuentan con edificios pensados para impartir la formación a los guardiamarinas, así como destinados a residencia de alumnos y oficiales.
Entre sus instalaciones, que se han modernizado recientemente, también podemos encontrar allí un puerto de amarre de naves militares y unas amplias zonas deportivas para la práctica varios deportes. En la escuela, la princesa de Asturias deberá seguir unas estrictas normas que comienzan con
el toque de diana a las 6:45 horas.
Como última curiosidad, en 1948 recién inaugurada escuela sirvió como escenario de una película muy popular en la época,
‘Botón de ancla’, dirigida por Ramón Torrado. Debido a su éxito, en 1960 se realizaría un remake protagonizado por el Dúo Dinámico.
