El 11 de mayo se cumplen 120 años del nacimiento del pintor catalán Salvador Dalí (Figueras, 1904-1989). El libro Dalí descodificado (NPQ Editores) no es una biografía del genial pintor conocido por sus impactantes y oníricas imágenes surrealistas, sino un sentido homenaje, un acercamiento a las claves ocultas en su obra, su vida y su muerte. Es un libro con tantas reflexiones, tantas anécdotas y tanta información —existencia, muerte, inmortalidad, libertad, sentido de la vida, experiencias cercanas a la muerte, física cuántica, matemáticas, reencarnación, Dios, religiones, consciencia, Biblia, vida después de la vida, los misterios de la humanidad…— que es imposible abarcarlo en las pocas preguntas de una entrevista. Pero podemos intentar acercarnos al alma del libro, a través de su autor Svta. Clayton 1853, sin estropear la sorpresa al lector.
Pregunta. Afirma en el libro que no se puede entender la obra, vida y muerte de Salvador Dalí sin analizar cuestiones plasmadas en sus obras como las experiencias cercanas a la muerte (ECM), la geometría sagrada, la mitología clásica, los conceptos avanzados de física cuántica y las curvas matemáticas. ¿Es así?
Respuesta. Así es, en los relatos de ECM y en Física Cuántica, se constata la inexistencia del tiempo y el espacio tal y como lo concebimos y ello está reflejado en la obra de Dalí. La Geometría Sagrada, Proporción Áurea o Número de Dios (1,618), el artista la plasma de manera oculta en varias pinturas, en la cúpula geodésica y en el salón de los escudos del Castillo de Púbol.
En “La Persistencia de la Memoria” y en “En Búsqueda de la Cuarta Dimensión”, Dalí recurre a la mitología clásica mientras que en una de sus últimas pinturas, se inspira en la curva de la “Teoría de las Catástrofes” de René Thom.
P. Dalí tuvo la premonición de su muerte en la obra ‘Cuando cae, cae’, donde aparece la fecha de su fallecimiento. Siempre tuvo muy presente la muerte y su deseo de inmortalidad y se sintió atraído por el paso al más allá. ¿El hecho de que la muerte siga siendo un tabú es una gran irresponsabilidad de nuestra sociedad?
R. Absolutamente. Nuestra sociedad occidental nos prepara para afrontar el escenario material en el que desarrollamos nuestra breve existencia física, pero obvia el proceso más transcendental que es la muerte. Al contrario de otras culturas, que siga siendo un tabú nos genera una gran inquietud y temor a este inexorable proceso. Es muy importante divulgar las pruebas y evidencias que apuntan a la inmortalidad y que proporcionan un gran mensaje de esperanza para vivir con armonía y felicidad.
P. Usted aporta un gran mensaje de esperanza: que no morimos. Está convencido de que la inmortalidad que proclaman todas las religiones está demostrada. Lo afirma con total convicción. ¿Cómo es esto?
R. La Inmortalidad está evidenciada por la reencarnación y por la hipnosis regresiva. Estudios muy rigurosos de universidades americanas, han demostrado miles de casos. Los médicos Eben Alexander (neurocirujano de Harvard) e Ian Stevenson (psiquiatra de la Universidad de Virginia) son referentes mundiales en estos asuntos.
También por las llamadas “Experiencias Cercanas a la Muerte”, donde está acreditado que no son alucinaciones, que no se producen por falta de oxígeno en el cerebro ni por endorfinas o cualquier otra sustancia. Ciegos de nacimiento han descrito el quirófano donde se encontraban, con todo lujo de detalles, estando clínicamente muertos. Obviamente, al retornar al cuerpo físico gracias a las maniobras de reanimación (que por cierto, siempre rechazan en este estado) , han perdido esta facultad. En nuestro país contamos con el prestigioso Dr. Manel Sans que da una respuesta a las ECM basada en el método científico, a través de la Física Cuántica.
P. Dalí dijo: «Por las matemáticas sé que Dios existe, pero no tengo fe». Aun así, en el libro se analizan patrones geométricos sagrados, cósmicos, místicos, divinos (representando el número de Dios) e incluso esotéricos presentes en su obra que nos acerca a Dios. ¿Cuál es el que cree fundamental?
R. Está acreditado que existen patrones matemáticos que son constante en galaxias, la flor del girasol, concha de Nautilos, en los cuernos de los rinocerontes…que sólo pueden derivar de un creador (cada uno lo puede llamar como quiera). Dalí enmarca con geometría sagrada, de manera no visible, muchas de sus pinturas, lo que las convierte en verdaderas puertas inter dimensionales que nos aproximan a Dios al cumplir la proporción áurea (1,618), el Código Fuente con el que se ha creado el Universo y a nosotros mismos a través del ADN.
P. Dalí afirmaba que ‘La cesta de pan’ era la pintura más esotérica y misteriosa que jamás había pintado.
R. Este aparentemente sencillo cuadro esconde el mayor misterio de toda la obra de Dalí. Las únicas claves son las aportadas por él mismo: “El enigma total”, “La pintura más esotérica” y por su buen amigo Antonio Pitxot, director de sus museos: “El Armiño prefiere la Muerte a la mancha”.
Recurriendo al alquimista Fulcanelli, a la etimología de la palabra “cesta” y a un artesonado de un castillo medieval de Francia, he aportado mi nueva interpretación a esta fascinante pintura.
P. Siempre negó Dalí que se inspirara en la teoría de la relatividad de Einstein para crear ‘La persistencia de la memoria’ y usted afirma que tiene una inspiración bíblica, mitológica, cuántica y trascendental… ¿Cuál es el significado oculto de los tres relojes blandos de esta obra?
R. Efectivamente, la inspiración bíblica asume el Salmo 67 de David de la Biblia Vúlgata y la “Subida al Monte Carmelo” de San Juan de la Cruz, la mitológica, la leyenda de “Jasón y el Vellocino de Oro”, la cuántica porque el tiempo, no es que sea relativo, es que realmente no existe como lo percibimos y la transcendental, por el mismo título del cuadro: La memoria “persiste” a pesar de la muerte, está fuera del cerebro y es eterna.
P. El libro está lleno de muchas muchísimas anécdotas y curiosidades que no vamos a desvelar, pero me gustaría que nos hablara de la trágica historia del hundimiento del Titanic que usted ve como un claro ejemplo de la reacción del ser humano ante la inmediatez de la muerte.
R. El Titanic nos sitúa en un escenario real en el que más de 2000 personas asumen que la muerte está muy cerca y que incluso es segura para la mayoría de ellos. En este proceso se dio cita lo mejor y lo peor del ser humano. Comportamientos admirables (Capitán Smith, la famosa Orquesta, Benjamin Guggenheim…) contrastaron con que no se respetaron las leyes del mar, algún hombre se disfrazó de mujer para salvarse o que la naviera RMS reclamara el coste de los uniformes a los músicos.
P. ¿Qué anécdota o descubrimiento vital —reflejado en el libro o no— le ha impactado más en la vida, le ha llevado a descubrir o entender algo clave en su vida?
R. Sin duda alguna la revista “Muy Interesante”. Cuando tenía 14 años y estudiaba en La Salle de Paterna de Valencia, leí un artículo de “Vida después de la Vida”. 42 años después, sigo estudiando el fenómeno y ha sido el germen del libro “Dalí Descodificado”.
En segundo lugar, sugerir mi propia interpretación al mayor misterio de Salvador Dalí: El motivo por el que decidió no ser enterrado en el castillo de Púbol y descansar bajo la cúpula geodésica (pura geometría sagrada) de su Teatro Museo de Figueras.
Como anécdota, descubrir una roca en la isla Kangoroo de Australia, muy similar a la del Pla de Tudela (Cap de Creus), que inspiró a Dalí en una de sus más famosas pinturas.
P. Este libro hay que leerlo con la mente muy abierta. ¿Teme que no se entienda, que el objetivo con el que lo escribió no sea comprendido?
R. Sin querer convencer a nadie de nada (las conclusiones serán de cada uno), efectivamente, ese el reto, estar dispuesto a considerar otras perspectivas al margen de las creencias existenciales que cada uno tenga. Lo que se apunta en el libro son evidencias, pruebas contrastadas y no “dogmas de fe”. El premio, una gran esperanza para la continuidad de la existencia, una vida a gozar con más intensidad, empatía y bondad y sobre todo, con la pérdida del miedo a la muerte.