Lo mejor: te puedes hacer con él.
Los restomod son una moda relativamente reciente que divide opiniones. Algunos creen que es un sacrilegio modificar hasta el extremo modelos clásicos, otros están muy a favor y la opinión de algunos varía en función de hasta dónde llegue el trabajo del preparador. Lo que es innegable es que en ocasiones da resultados tan buenos como el de este Toyota FJ40.
Es obra de Icon 4×4, una auténtica institución en la materia que se ha labrado un nombre a base de devolver a la vida de manera espectacular a todoterrenos clásicos de todas las marcas. La compañía se caracteriza por llevar a cabo trabajos a fondo en los que toca prácticamente todos los aspectos del modelo de turno y el Toyota no es ninguna excepción a la norma.
El diseño y proporciones del pequeño Toyota Land Cruiser son perfectamente reconocibles, pero las modificaciones que ha recibido son palpables.
Luce una pintura en gris mate, calza llantas de aleación de 18 pulgadas acabadas en negro, el toque de color lo ponen las pinzas de freno rojas, tiene un techo de tela negra que parece desmontable, en la parte frontal de éste monta una fina barra LED para la iluminación auxiliar, en la defensa delantera lleva instalado un winch, etc.
Además, tampoco le faltan accesorios prácticos para quien quiera llevárselo a hacer off-road, como son la rueda de repuesto y una lata para transportar gasolina adicional, ambos colocados en la parte trasera del vehículo.
Pasando al habitáculo, hace gala de la sencillez propia de un modelo de su época, puesto que no se han añadido muchos elementos modernos, pero presenta unos acabados de alta calidad.
El salpicadero es de plástico, cuenta con placas metálicas, los pedales también son de metal, el volante de tres radios es bastante sencillo, la tapicería combina el cuero negro con tela estampada, los asientos delanteros están calefactados…
Un detalle curioso es que, para no romper el ambiente clásico del interior, se ha optado por incluir una pantalla para operar el sistema multimedia, pero ligeramente oculta a la vista: se encuentra colocada justo en la parte delantera del reposabrazos central
Por último, uno de los cambios más significativos se encuentra bajo el capó, donde se ha reemplazado el motor original por un propulsor 5.7 V8 firmado por Vortec del que no se ha concretado la potencia, pero que seguramente no será poca. El bloque se asocia a una caja de cambios manual de cinco velocidades Aisin AX15.
Si te gusta lo que plantea este Toyota FJ40 con motor V8, tenemos que decirte que estás de suerte, puesto que va a subastarse dentro de una semana, el próximo 6 de abril en el evento que celebra Mecum Auctions en Houston.
Eso sí, no hay una estimación del precio que podría alcanzar, aunque a todas luces no será barato, por varios motivos: es una creación exclusiva de Icon 4×4, está en un estado inmaculado y además prácticamente ni lo han estrenado, puesto que solo acumula 4.000 millas, es decir, algo menos de 6.500 km, a sus espaldas.