Fernando Alonso no ha podido pelear con los líderes del Gran Premio de Bahréin y ha finalizado en el noveno puesto que pronosticaba la simulación del equipo Aston Martin.
Fernando Alonso ha finalizado el Gran Premio de Bahréin de Fórmula 1 en la novena posición, después de enfrentarse a una carrera en la que su Aston Martin AMR24 no tuvo ritmo para pelear con McLaren, Mercedes, Ferrari ni, por supuesto, Red Bull. En esta carrera no había prestaciones para más que para sumar dos puntos.
El piloto asturiano partía en Bahréin desde la sexta posición, un resultado conquistado en una vuelta en clasificación que incluso parecía ser mejorable, ya que Fernando solo tuvo un juego de neumáticos blandos y un intento de vuelta rápida. El ritmo de Alonso hacía soñar con el podio, al que subió el año pasado saliendo quinto, pero pronto quedó claro que sería imposible.
Nada más comenzar la carrera, Alonso cayó en las garras de los McLaren de Lando Norris y Oscar Piastri, que no tardaron en adelantarle. Unos giros más tarde, Lewis Hamilton también pasó al asturiano, que cayó al noveno lugar y quedó en tierra de nadie, con Hamilton y los McLaren lejos delante y el Stake F1 de Guanyu Zhou lejos por detrás.
El equipo Aston Martin F1 decidió retrasar la segunda parada de Alonso, con la esperanza de que hubiera un accidente o una bandera roja que les llevase hacia arriba. Pero la carrera de Bahréin no tuvo demasiados incidentes y Alonso incluso perdió dos posiciones con Guanyu Zhou y Lance Stroll.
Pero con neumáticos más jóvenes, Fernando logró adelantarlos tanto al Stake F1 como al otro Aston Martin para terminar noveno y sumar dos puntos. Su compañero, Stroll, acabó décimo.
El análisis del GP de Bahréin de Fernando Alonso
«Ha sido una carrera difícil. Las simulaciones indicaban que éramos el quinto equipo en pista y que en condiciones normales (los Aston Martin) lucharíamos por el noveno y décimo puesto, y se ha cumplido«, dijo Alonso a DAZN F1 tras el Gran Premio de Bahréin.
«Nos hemos visto en tierra de nadie, con los McLaren 18 segundos por delante y el Stake F1 de Guanyu Zhou lejos por detrás, así que intentamos parar más tarde por si nos veíamos beneficiados por un Safety Car o una bandera roja, pero no pasó nada en toda la carrera», señaló el piloto ovetense.
«Una vez que ves que no puedes con los de delante, hay que aceptar que te faltan esas tres o cuatro décimas de ritmo, así que si te lo permite la ventaja que tienes en carrera, hacemos una estrategia diferente, aunque no sea óptima, por si ocurre algo», explicó.
«En esta primera carrera confirmamos que tenemos cuatro equipos por delante. Hemos empezado como acabamos el año pasado, detrás de McLaren, Ferrari, Mercedes y Red Bull. La vuelta en clasificación fue excepcional y nos colocó muy arriba, antes de comprobar hoy la realidad», concluyó.
El próximo desafío para Fernando Alonso es el Gran Premio de Arabia Saudí, donde Aston Martin se enfrentará a un circuito muy distinto… y donde el año pasado el bicampeón mundial conquistó su segundo podio de la temporada. La de Bahréin ha sido solo la primera de 24 carreras: hay mucho por mejorar, pero también mucho tiempo para hacerlo.
