La infanta Elena, en una imagen de archivo. /
GTRES
Está claro que no hay contratiempo que impida que
la infanta Elena acuda a los eventos que son importante para ella y para los que su apoyo es fundamental. Hace unas semanas la vimos aparecer con
una férula en una pierna. Causó mucha sensación, pero todo lo que se publicó en ese momento fueron especulaciones que, por cierto, eran certeras.
El evento en cuestión era la VIII entrega de premios de
la Asociación de la Prensa Deportiva de Madrid y la hija de los
reyes Juan Carlos y
Sofía mostró la mejor de sus sonrisas. Fue posteriormente cuando explicó a la periodista Paloma Barrientos que se le había producido un esguince montando a caballo.
El nuevo problema de salud tiene que ver con la vista. En esta nueva ocasión, la hermana del
rey Felipe VI acudía a la entrega de premios de la peña Las Meninas, sí desveló las situaciones que ha vivido recientemente y, sin duda, al no tratarse de nada serio, les restó importancia.
La exmujer de
Jaime de Marichalar ha sido operada de una catarata en un ojo y la operación ha salido estupendamente, como corrobora el hecho de que haya podido asistir a este evento. La infanta Elena ha respondido con humor que se trata de
cosas de la edad y nuevamente se ha mostrado encantadora. «Los años pasan para todos», subrayó.
A propósito del percance,
fue más explícita: «El accidente fue de la manera más tonta. Al desmontar del caballo me enganché el pie y tuve el esguince, pero ya puedo apoyarlo», ha desvelado la infanta, que quiso apoyar con su presencia a Mari Ángeles Grajal.
La infanta Elena, todavía lesionada. /
GTRES
Otra de las cuestiones que abordó fue
la salud de su padre y cómo se lleva con su hijo, Froilán: «Se encuentra muy bien y en plena forma para su edad. Con Felipe han formado un buen equipo. Suelen comer varias veces por semana», dijo la infanta, que acompañará próximamente a
su padre a Sanxenxo para las regatas.
Froilán parece haberse adaptado muy bien a
su vida en Abu Dabi y no tiene intención de regresar a nuestro país. Ha sido una forma de abrirse camino,
bajo el paraguas del rey emérito, pero también apartarse de España, donde ha sido objeto de numerosas polémicas.
Victoria Federica se abre camino
Su madre, la infanta Elena, ha corroborado que se está adaptando fenomenal a esa nueva vida en un país donde también
está más protegido mediáticamente, porque no hay posibilidad alguna de que se le hagan fotos que puedan después venderse en España.
Victoria Federica, su hermana, por el contrario, sigue establecida en España, donde
se abre camino como influencer. Aunque ha tenido algunos desencuentros con la prensa, han sido menos las polémicas en las que se ha visto involucrada.
