La autovía A-2 estrena un nuevo carril en el que no importará la etiqueta medioambiental, sino el número de pasajeros con los que cuente el vehículo.
A finales de septiembre, principios de octubre de 2025, se espera la incorporación de un nuevo carril VAO en la autovía A-2, el cual provocará cambios importantes para todos aquellos conductores que quieran acceder a la capital desde el Corredor del Henares. No obstante, la creación de este carril esconde una medida restrictiva, que no depende de la etiqueta medioambiental, sino del número de pasajeros.
Una medida que fomenta el uso compartido de los vehículos
Según la Dirección General de Tráfico (DGT) la implantación de esta medida, en la cual las etiquetas medioambientales no cobran importancia, tiene como objetivo la reducción de vehículos en la vía con un único pasajero. De esta manera, y como espera la institución, se fomentará el uso compartido de transportes y así la descongestión del tráfico que sufre Madrid diariamente.
Tal y como menciona la DGT, la implantación de esta medida podría beneficiar a más de 20.000 personas diariamente. Una reforma que no discrimina etiquetas medioambientales, pero sí que apuesta por la colaboración común para reducir las emisiones contaminantes.
Independientemente de la etiqueta medioambiental que porte cada vehículo, esta vía estará terminante prohibida para los coches y vehículos con solo un ocupante, las furgonetas no homologadas y que no respeten las exigencias del Reglamento General de Circulación ni los vehículos distintos a turismos o autobuses.
Por otro lado, entre los vehículos que sí podrán acceder a este carril se encuentran los coches con al menos dos pasajeros, motocicletas, autobuses y vehículos mixtos adaptados con dos o más ocupantes.
Cabe mencionar que esta vía se activará únicamente en hora punta y contará con medidas de señalización, balizas y sistemas inteligentes para comunicar a los conductores en todo momento de la situación del carril.
Un proyecto que lleva esperando más de ocho años para su implantación
La creación de este carril VAO lleva sobre la mesa de Tráfico desde 2017. Sin embargo, su retraso, agravado por la pandemia mundial del COVID-19 y problemas políticos y presupuestarios, han aplazado su estreno hasta 2025. Todavía se desconoce si esta vía se podrá utilizar a mediados del mes de septiembre o a principios de octubre, pero es cuestión de tiempo que este carril vea la luz.
El proyecto consta de dos fases, una que conecta Torrejón de Ardoz (km 23,5) con la M-30 (km 4,2) al que se le suma los 14,3 kilómetros de entrada. Respecto al carril de salida, este entra en vigor desde el kilómetro 6,1 hasta el 14,9 (a la altura del distrito de San Blas-Canillejas).
Reformas que buscan la seguridad de la vía
Otra de las medidas implantadas por la DGT para asegurar una correcta circulación en las carreteras es la implantación de un nuevo radar. Este dispositivo no estará pendiente de la velocidad del vehículo, sino de la distancia respecto al coche que tenga delante.

La distancia de seguridad no se respeta por parte de muchos conductores, y es la causante de muchos accidentes, por lo que este nuevo sistema pretende castigar a aquellos que no respetan la distancia mínima de 70 metros que marca el Reglamento General de Circulación.
La ubicación de estos radares se trasladará al conductor a través de la señal S991f, recién incorporada en el catálogo de señalización de la DGT, y la cual entró en vigor el 1 de julio. En el caso de no respetar la distancia mínima, se atribuirá una multa económica y la pérdida de puntos del carné de conducir.
Imagen | Getty Images
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Etiquetas: Contaminación