Hemos tenido una primera toma de contacto con el nuevo Omoda 5 2025 en su versión gasolina de 147 CV. ¿Vale la pena el renovado SUV chino?
Es una de las apuestas que comienzan a sonar más en nuestro país. Hoy os traigo la prueba del Omoda 5 en su versión de combustión interna. Porque, además de este modelo gasolina, también se acaba de lanzar el 100% eléctrico. Aunque ese caso lo dejamos para otra ocasión.
Omoda es una marca china que llegó recientemente a España, al igual que su hermana Jaecoo. Y su gran apuesta es el citado Omoda 5, un SUV de menos de 4,50 metros de largo con un precio bastante competitivo. En ciudades como Madrid ya se ven bastantes circulando por las calles, pero para 2025 ha recibido un restyling que vamos a analizar. ¿Valdrá la pena?
Diseño e interior del Omoda 5 2025
Este coche familiar posee unas medidas de 4.373 mm de largo, 1.824 mm de ancho y 1.588 mm de alto. Y cuenta con un peso de 1.530 kg. Cifras bastante coherentes que se traducen en un vehículo fácil de conducir en las ciudades.
Su diseño es bastante característico, principalmente debido a la parrilla delantera adiamantada y esculpida directamente en el parachoques. Si bien, hay pocos cambios respecto al modelo anterior. Nuevas llantas de 18 pulgadas, el lettering de Omoda en las ópticas posteriores y barras de serie en el techo.
En general, es un SUV elegante y con una estética diferente a la de otros modelos. Tanto de marcas europeas como chinas. Con ópticas LED y una firma lumínica elegante y muy afilada. Sin duda, el exterior está bien rematado.
Es el interior lo que no me ha terminado de convencer, con un cambio respecto al modelo anterior que me parece un retroceso. Se ha despejado la consola central, donde antes teníamos la palanca del cambio automático. Pero también dos cargadores inalámbricos de smartphone y varios botones físicos. Todo eso ha desaparecido.
Ahora hay una consola central muy plana con un par de espacios para objetos, un cargador y la palanca de cambios se ha colocado detrás del volante. Los botones físicos, en gran medida, también han desaparecido. Aunque puedes encontrar molduras de estilo madera muy elegantes.
El espacio interior es agradable, aunque no especialmente amplio. Tiene bastante luminosidad y una buena pantalla multimedia, que se une mediante un soporte curvo al cuadro de instrumentos digital. Finalmente, cabe destacar que el Omoda 5 2025 cuenta con un maletero de 370 litros ampliable hasta 1.149 litros tumbando la fila posterior.
Motorización y dinámica del Omoda 5 gasolina
El principal cambio respecto a la versión anterior es… Una disminución drástica de la potencia. Su motor 1.6 turbo de 4 cilindros en línea ha pasado de 186 CV a 147 CV de potencia. Mismo bloque, pero con modificaciones enfocadas en sistemas anticonaminación.
De todas formas, es suficiente potencia para un coche de este tipo, que puede moverse sin problemas incluso por carreteras de montaña con desnivel. Acelera de 0 a 100 km/h en 10,1 segundos y alcanza 195 km/h con un consumo de unos 7,0 litros a los 100 kilómetros.
A nivel de conducción, es correcto. No despunta en ningún ámbito, ni falla estrepitosamente en otros. Quizá, como con muchos coches chinos, su dirección es demasiado blanda y las suspensiones también. Pero esto le hace ser confortable, claro.
Curiosamente en ciudad hay un fallo enorme en su sistema: al pasar cerca de vallas u otros vehículos, su pantalla muestra las cámaras y sensores, superpuestas al navegador o a Apple CarPlay y Android Auto. Algo que sucede muy a menudo y es molesto.
¿Habría que tener en cuenta al Omoda 5 2025?
La calidad percibida, en general, es buena. Y su relación calidad-precio también es coherente, aunque hay aspectos mejorables en el interior y en su mecánica. En cualquier caso, ofrece algo que está en línea con lo que cualquier cliente podría demandar en un coche de este tipo.
Sus consumos pueden incrementarse ligeramente hasta los casi 8,0 litros a los 100 kilómetros y su precio parte desde 27.900 euros con dos acabados: Comfort y Premium. ¿El principal problema? Que tiene rivales muy fuertes. El KGM Korando (SsangYong), por ejemplo. O incluso el Mazda CX-30 con etiqueta ECO de la DGT (mientras que Omoda tiene etiqueta C).
Las calidades de esos dos modelos por un precio similar son mayores, y tienen detalles como conexión inalámbrica de Android Auto y Apple CarPlay, sistemas operativos más completos y botones físicos que siempre son de agradecer. Pero Omoda avanza rápido… No hay que perderles de vista.
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Etiquetas: gasolina, SUV, Coches chinos, Motores de combustión
Valoración
El Omoda 5 2025 cambia algunos aspectos de su diseño y mecánica de cara a 2025. Este SUV de 147 CV ofrece un diseño atrevido, un interior bastante cambiado y características dinámicas bastante coherentes en su segmento.
Lo mejor
Un diseño atrevido y diferenciado, con un interior tecnológico y una calidad general percibida coherente a su precio.
Lo peor
Algunos aspectos mejorables de su software, tiene menos potencia que el modelo anterior y su precio lo coloca frente a rivales muy fuertes.