Desplazarse al instituto o la facultad, hacer planes con los amigos, ir de compras por el centro… A partir de los 15 años con el permiso de conducir AM, sin necesidad de contar con un permiso de tipo B, ya se pueden hacer con total seguridad y sin tener que depender de los horarios y las líneas de transporte público, aguantar los caprichos del clima como en un ciclomotor, enfrentarse a las restricciones a la entrada de vehículos térmicos a ciertas áreas o soportar aglomeraciones en hora punta. Y es que en el idioma de Citroën, Ami significa “amigo” y, también, “libertad”.
Así que, en vacaciones, este verano, no se me ocurre un mejor aliado para moverse por la ciudad, la playa o los pueblos que elijas como destino. Su carácter funcional, su conducción sencilla y por su diseño compacto y simétrico recuerdan a un simpático robot o a un juguete.
De hecho, y como dato curioso, las playas figuran entre las regiones en las que se han matriculado más unidades de este modelo, con Valencia, Alicante, la Costa del Sol, Mallorca, Almuñecar o Almería‑Cabo de Gata entre las primeras del ranking.
El tamaño es otro de sus puntos fuertes. Con unas dimensiones compactas de 2,41 m de largo y 1,39 m de ancho el Citroën Ami se mueve como pez en el agua por el centro urbano y aparca sin estrés en el espacio de media plaza de estacionamiento, tanto en línea como en batería. Los desplazamientos se realizan con el máximo confort.
Además de la seguridad que representan sus cuatro ruedas y su carrocería cerrada, este vehículo cuenta con sistema de calefacción, ventilación y desempañado del parabrisas.
Sus dos plazas permiten viajar en compañía en un habitáculo amplio y muy bien aprovechado, con 63 litros de capacidad de carga delante del asiento del pasajero, suficientes para una maleta mediana, y aún más espacio en la parte trasera.
A bordo de este objeto de movilidad es imposible pasar desapercibido, más aún si se tienen en cuenta sus múltiples posibilidades de personalización, que combinan colores, equipamientos y elementos estéticos de arte urbano.
Con la practicidad como elemento clave de su ADN, el Citroën Ami ofrece una autonomía de 75 km y una velocidad máxima de 45 km/h, más que suficientes para cubrir la mayoría de los desplazamientos del día a día.
Además, se carga al 100%, de un modo muy sencillo en una toma estándar, en tan sólo 3 horas. Como vehículo de su tiempo, asegura un alto nivel de conectividad a través del sistema DAT@AMI, que se maneja desde el smartphone a través de Bluetooth.
Además de romper moldes por su estilo, su confort y poder conducirlo sin necesidad del permiso de tipo B, el AMI ha introducido un modelo de comercialización novedoso. Además de estar disponible en una selección de distribuidores Citroën (concesionarios, servicios oficiales y puntos), se puede adquirir online a través de la web https://store.citroen.es/ami, la opción elegida por una de cada tres personas que han adquirido un Citroën AMI.