Penélope Cruz en los Premios Goya 2024. /
limited pictures
Era la actriz más esperada de los
Goya 2024 en los que ha arrasado La sociedad de la nieve y su aparición no ha defraudado.
Penélope Cruz fue de las últimas en pisar
la alfombra roja de los Premios Goya 2024 y su look se convirtió en uno de los ganadores de esta 38ª edición de los premios del cine español. Sí, una vez más de la mano de
Chanel, la actriz deslumbró sobre el tapete rosa extendido en el recinto de Feria de Valladolid.
Penélope Cruz, que acaba de estrenar un
cambio de look con un corte bob, llegó a la gala -esta vez en calidad de entregadora de premio y no de nominada- y dejó claro que hay pocas mujeres como ella en cuanto a estilo se refiere. Ni Sigourney Weaver ni otros rostros conocidos que posaron en la
red carpet consiguieron robarle el protagonismo.
Fiel a la
maison francesa, marca de la que es embajadora, Penélope Cruz volvió a colocarse
a la cabeza de las listas de la mejor vestidas de la gala por excelencia del cine español. En todas y cada una de las ediciones a las que ha acudido, su look se ha convertido en una propuesta icónica que ha sido de lo más apluadida y que ha quedado para el recuerdo. Y este año no podía ser menos.
Y aunque el favoritísimo de todos es aquel espectacular Ralph&Russo que llevó en 2020 y con el que demostró que cuando arriesga un poco el resultado es muchísimo mejor, la intérprete volvió a colocarse como la mejor de la gala. Y esta vez lo hizo con un
diseño que ha presentado recientemente la firma.
En concreto, se decantó por un vestido largo íntegramente
bordado con rosas y fresas en tonos negro, rosa y azul, una combinación de colores de lo más favorecedora que destacaba también por la sobrefalda de tul negro que acompañaba todo el diseño.
Se trata del look número 34 de la colección de Chanel Alta Costura Otoño-Invierno 2023/24 y, como todo aquello que la marca de lujo hace, es una pieza que podríamos definir como una
auténtica obra de arte. ¿El motivo? Que para la confección del vestido se necesitaron 1.260 horas de trabajo y alrededor de 367.000 elementos bordados.
Una auténtica fantasía que la actriz combinó con
joyas también de Chanel. En concreto, añadió los pendientes Turquoise Waters, pieza de oro blanco de 18 quilates, diamantes y zafiros; el nillo Rose Tendre, en oro blanco y oro rosa de 18 quilates, diamantes, cuarzo rosa esculpido y perlas de cultura; y el anillo Curved Feather en oro blanco de 18 quilates y diamantes.
Penélope estaba guapísima y una gran parte de culpa la tiene
el corte de pelo bob que se ha hecho hace tan solo unas semanas. Para esta ocasión, se decantó por llevarlo con un ligero aspecto messy con una onda rota y muy suelta y peinado hacia a un lado. Y sí, no le podía favorecer más.