Und esynio con semillas. /
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Aunque es necesario cuidar la alimentación en cualquier etapa de la vida, a partir de los 50 hay que tener en cuenta siempre ciertos tipos de alimentos que pueden ayudarnos con las necesidades básicas.
En la mujer, la llegada de la menopausia trae consigo diferentes cambios físicos y psicológicos a los que se puede hacer frente (siempre bajo supervisión) de forma natural. Sin embargo, esa bajada de estrógenos, que al final es la culpable de que aparezca la menopausia, no se puede controlar. Lo que sí se pueden controlar so n los síntomas asociados a ella y, para esto, la dieta puede ser de gran ayuda.
Y es que, ya te hemos contado cuál es el
alimento con fibra ideal para la menopausia
o
qué es lo que debes comer para producir colágeno natural.
De hecho, hay
alimentos que regulan los niveles de estrógenos
, aunque no los lleven en su composición. Algunos forman parte de la lista de los
mejores alimentos para tomar en la menopausia
.
pero hoy queremos hablar de algo más específico: de
dos tipos de semillas que tienen colágeno natural y que, por ende, son perfectas para mujeres a partir de los 50 años.
Semillas con estrógenos para incluir en la dieta
Aquí puedes encontrar una
lista más larga de alimentos ricos en colágeno
pero queremos pararnos a analizar exactamente uno de los grupos que más proporción de colágeno tiene en su composición:
las semillas. Es cierto que no todas tienen la misma proporción, así que vamos a decirte cuáles son las dos semillas con más colágeno y cómo tomarlas para que las añadas a tu dieta.
«Las semillas tienen un alto índice de
estrógenos naturales«, explican los profesionales de Domma en su página web. Entre ellas, hay dos que destacan: las
semillas de lino y las semillas de chía.
«Las semillas de lino son una de las fuentes más ricas en lignanos, un tipo de fitoestrógeno que actúa de manera similar a los estrógenos humanos», explican desde el
Instituto de la Menopausia
. «Por eso, es muy beneficioso en la menopausia», continúan. De hecho, apoyan su teoría en la conclusión de un estudio científico que descubrió que suplementar con
40 gramos de semillas de lino molidas es tan eficaz como la terapia de reemplazo hormonal que se usa en la menopausia para aliviar sus síntomas leves.
Lo mismo ocurre con las semillas de chía: son una fuente natural de lignanos, este fitoestrógeno que ayuda a regular el estrógeno del cuerpo en la mujer.
Pero es que, más allá de su contenido en fitoestrógenos, estas y otras semillas son ricas en ácidos grasos Omega-3, que contribuyen a mejorar y conservar la buena función de la memoria, algo que también hay que cuidar pasados los 50.
Cómo tomar semillas de chía y de lino
Ahora bien, si recuerdas, te contamos que
estamos tomando las mal las semillas de chía
. Lo mismo ocurre con todas las demás. Si tú eres de los que espolvorea un poco de semilla de chía, de lino o de sésamo encima de sus bowls de yogur, deja de hacerlo porque lo único para lo que te está sirviendo es para decorar el plato.
Como son tan pequeñas, para poder extraer todos los nutrientes de las semillas,
es necesario procesarlas: o molerlas o hidratarlas previamente a su consumo añadiéndolas a un vaso de agua o leche (o bebida vegetal) para que forme el gel viscoso que ayudará a su digestión.