Las velas solares utilizan la presión de la luz solar para la propulsión, inclinándose hacia o alejándose del Sol de modo que los fotones reboten en la vela reflectante para empujar una nave espacial. Esto elimina la necesidad de sistemas de propulsión pesados y podría permitir misiones de mayor duración y menor costo. Los resultados de esta demostración de tecnología, incluida la prueba del sistema de pluma compuesta de la vela, impulsarán la futura exploración espacial para ampliar nuestra comprensión de nuestro Sol y nuestro sistema solar.
El Sistema Avanzado de Vela Solar Compuesta, que se lanzó en abril de 2024 y desplegó su vela reflectante en agosto, se encuentra actualmente en órbita aproximadamente a 600 millas (1000 kilómetros) sobre la Tierra y con frecuencia es visible en el cielo nocturno para los observadores del hemisferio norte. Los fanáticos de la nave espacial pueden buscar la vela en el cielo nocturno usando un»https://www.nasa.gov/general/like-a-diamond-in-the-sky-how-to-spot-nasas-solar-sail-demo-in-orbit/»>nueva característica en la aplicación móvil de la NASA. La visibilidad puede ser intermitente y la nave espacial podría aparecer con niveles variables de brillo a medida que se mueve en órbita.
El Centro de Investigación Ames de la NASA en Silicon Valley, California, gestiona el proyecto del Sistema Avanzado de Vela Solar Compuesta y diseñó y construyó el sistema de diagnóstico con cámara a bordo. Langley de la NASA diseñó y construyó las barreras compuestas desplegables y el sistema de velas solares. La oficina del programa de Tecnología de Pequeñas Naves Espaciales (SST) de la NASA con sede en NASA Ames y dirigida por la Dirección de Misiones de Tecnología Espacial (STMD) de la agencia, financia y gestiona la misión. El programa Game Changing Development de NASA STMD financió el desarrollo de la tecnología de pluma compuesta desplegable.